Última actualización el febrero 20, 2025
El principio “hacer de la necesidad virtud” del dictador Sánchez le ha llevado a cometer en el Congreso de los Diputados la ignominia, el esperpento visto en esa Cámara Legislativa, al cumplir la orden dada por el prófugo Puigdemont, con lo que vuelve a demostrar que gobierna España “con mando a distancia”.
Los esperpentos que ha cometido el dictador Sánchez , en cumplimiento de las órdenes de prófugo de la justicia, muestran constantemente la calaña de la que está hecho Sánchez.
El mal llamado, y pero interpretado “principio” aludido no pretende ser más, en el caso de Sánchez, que una aparente justificación, porque a Sánchez no le preocupan las justificaciones, ya que con esas ignominias, los independentistas le sostienen en el poder dictatorial, a cambio de venir al Congreso a cobrarse los votos.
Sánchez es la degradación social, la ignominia a los españoles, víctimas y no víctimas, en otro de los pagos por mantenerse en el poder dictatorial: han traído a un terrorista al Congreso para llamar terrorista al estado (Álvarez de Toledo) . Sánchez vive con la calculadora en la mano y nada le perturba. Es un psicópata.
“ El fin justifica los medios “ y la Presidenta del Congreso tenía que ser Armengol. Es otra parte del pago por “okupar” la Moncloa.
Vergüenza y humillación al pueblo español por siete votos: Otra más. No se puede caer más bajo, pero es que Sánchez no tiene fondo.
Solo se acabará con este pago servil de Sánchez, esta serie de ignominias, esta degradación política y social constante con los votos de la derecha ciudadana, pero después de las últimas experiencias, frágil dependencia es ésta.
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